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Así lo demuestra un caso de estudio comparativo entre la enseñanza con tecnologías tradicionales y actuales, realizado en el Jardín Infantil Mi Dulce Hogar de Palmira (Valle del Cauca).

Así, por ejemplo, en lo que tenía que ver con la atención de los niños en las clases que utilizaban nuevas tecnologías, hubo un 100 % de respuesta positiva, es decir, todos mostraron más interés por las clases.

Asimismo, en la variable sobre el gusto por la actividad con tabletas, se evidenció que este es positivo en un 75 %, lo cual implica que seis niños estuvieron satisfechos con la prueba implementada; en general, el 87,5 %, cinco de los pequeños, mostró entusiasmo por las actividades.

Para su estudio de caso, la estudiante trabajó con ocho niños de preescolar, de cuatro a cinco años de edad, y su maestra.

“Desde el diseño, pocas veces se valida cómo las herramientas tecnológicas influyen en la educación, solemos asumir que serán beneficiosas, y entonces se introducen tabletas digitales, computadores, pizarras interactivas, etc., a las aulas de clase, pero no se conoce su efectividad”, señala Luz Nery Janamejoy Madroñero, estudiante de décimo semestre de Diseño Industrial de la Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira.

La iniciativa de Luz Nery cobra mayor validez, si se tiene en cuenta que el proceso de desarrollo de los niños tiene sus bases en los primeros seis años de vida, por lo cual, “al tratarse de una generación de ‘nativos digitales’, las dinámicas educativas se alinean o corren el riesgo de volverse obsoletas”.

En cualquiera de estos escenarios, los niños buscarán y tendrán libre acceso a los contenidos de la web, lo que preocupa respecto a la información que asimilen y a su posible repercusión, más aún, cuando hay un desplazamiento de las artes y humanidades de los planes curriculares, sostiene la estudiante de diseño industrial.

Refiriéndose a su estudio, manifestó que, inicialmente, se analizó la dinámica de una clase de sistemas tradicional, para compararla con la prueba, la cual consistió en el uso de tabletas digitales con una aplicación para dibujar y colorear.

De igual manera se evaluó a la profesora en relación con las demandas de los niños, y se encontró, por ejemplo, que la aceptación de ella hacia la expresión de sentimientos de los niños era del 88,5 %, es decir que había buena disposición para atender sus solicitudes e inquietudes. También, en un 69,2 % de las veces, la maestra aceptaba o usaba ideas de los estudiantes durante la clase, lo cual es un valor positivo que permite reconocer los esfuerzos para fortalecer su aprendizaje.

De acuerdo con los resultados y su respectivo análisis, se concluye que la introducción de herramientas tecnológicas, como tabletas digitales y aplicaciones, en la formación preescolar, puede contribuir significativamente en las interacciones de docente y alumno, respecto a los demás; asimismo, que forma un ambiente agradable al colaborar, dialogar y compartir, cuyos aspectos se identificaron disminuidos en la clase convencional, comparada con la prueba realizada, en la que también desempeñó un papel importante la novedad tecnológica.

Este factor favoreció que los participantes hayan manifestado emoción y agrado frente a la actividad, lo cual permite deducir que, en el hipotético caso de introducir tabletas digitales a las clases, los individuos podrían presentar el mismo comportamiento positivo de asimilación del material de trabajo como algo emocionante al comienzo, aunque posteriormente puede ser obsoleto.

“La ventaja de esta herramienta tecnológica, ante este posible inconveniente, es que para el fortalecimiento de la novedad se puede recurrir a la actualización constante de software o aplicaciones, que facilitan la exploración de una gran cantidad de temáticas, además de las artes, y enriquecen tanto la dinámica de las clases como los conocimientos adquiridos por los alumnos a un ritmo fluido, manteniéndolos en constante interés”, concluye la estudiante.

Para la obtención de estos resultados, la futura diseñadora industrial, empleó observación directa de las clases mediante medios audiovisuales, fichas, plantillas de registro, etc.

Se dispusieron tabletas digitales con una aplicación para dibujar y pintar (en iOS se usó Draw y en Android, Doodle Master) para la muestra seleccionada.

Se evaluaron las actitudes del docente al momento del desarrollo de la clase, y las del alumno en la interacción niño–tableta–entorno. Asimismo, se implementó una ficha de registro de observación y cuestionario de escala (Likert), que permitió evaluar los resultados mediante el software estadístico SPSS, versión 21, donde se procesaron los datos obtenidos para determinar las diferencias entre las clases convencionales y la prueba.

La investigación, elaborada como ejercicio académico de la clase Proyecto Especial, dictada por el docente John Cardozo, se sumó a otros cuatro trabajos de la Sede Palmira, que fueron aprobados y necesitan apoyo económico para ser expuestos en la “Séptima conferencia internacional de factores humanos y ergonomía aplicada”, del 27 al 31 de julio de 2016 en Orlando, Florida (Estados Unidos).

(Por: Fin/HAA/MLA/JAAH)
N.° 448

Tomado de: Agencia de Noticias UN.